En el momento del empleo del alcoholímetro, el destilador debe registrar los resultados de la lectura (porcentaje del alcohol destilado) para, futuramente, utilizar como referencia. Las lecturas del alcoholímetro deben de ser siempre efectuadas desde la parte inferior del menisco (punto A).
Método:
En el momento del empleo del alcoholímetro el destilador debe escoger uno de los siguientes métodos:
- Uso de un pico de papagayo, que será fijado a la salida del pico del recipiente de condensación. Este pico fue diseñado para sujetar el alcoholímetro, permitiendo así que el destilador haga la lectura del porcentaje alcohólico con relativa facilidad.
- Uso de una jarra para probar el vino, la cual deberá ser lavada con agua tibia y secada, antes de ser usada. Eche el destilado en la jarra de prueba, a unos 5cm de distancia del borde. ¡Cierre la jarra de prueba con una película de plástico y, con la palma de la mano, agítela 10 veces! Después, sumerja lentamente el alcoholímetro en el líquido hasta que este flote libremente. ¡El hidrómetro no debe tener burbujas! La lectura es hecha al nivel de la superficie del líquido. Registe la temperatura del líquido. Asegúrese de que la temperatura local, del líquido y del instrumento sea la misma. Guarde la jarra de prueba, el líquido y el instrumento durante aproximadamente 4 horas en el mismo local donde haya efectuado la prueba
Los destiladores deben siempre optar por usar un alcoholímetro con el termómetro que se encuentra soldado al área de la cámara de vapor del alambique. Con la ayuda de estos dos instrumentos, el destilador será capaz de recoger la información sobre el tipo de alcohol que está siendo producido y de saber los puntos precisos de corte, que se encuentran especificados en las normas básicas de la destilación, que deben ser siempre respetados.